sábado, 6 de julio de 2013

Morrocoy Volteado en Bike Park

Hoy fue una rodada familiar, fui con Ro al "Bike Park" de La Lagunita, ubicado en el municipio El Hatillo, es un pequeño paraíso, está bien bonito y mantenido. Tiene un parque para los niños, y varias rutas que compartimos los ciclistas y los senderistas. Hay un señor que cuida el parque, cuyo nombre olvidé, que vende papelón con limón divino. El parque tiene también algunos animales, yo vi gansos, gallinas, un pequeño lago donde se pesca y varios morrocoyes.

Como morrocoy volteado quedé por segunda vez en esa primera subida que marca el inicio de la ruta. La intenté sacar después de un tiempo, predispuesta quizá, sin éxito. Es tan empinada y técnica que la bici se me paró en caballito y para no caerme del camino (como la vez anterior que caí desde bien alto) no sé cómo me tiré al piso y la bici voló, y así fue como quedé como "morrocoy volteado".

Después de ese comienzo, la primera vuelta siguió con esa tendencia, traspiés tras otro, y golpe y caída (.... ¡Fue horrible!... Hasta pensé: por qué no mejor me quedo con la modalidad de ruta y ya). Al terminar por fin la primera vuelta me salí un rato, me comí una galleta ( "y le baje dos"), las dos siguientes vueltas me sentí mucho mejor y me las disfruté por fin, sobretodo la bajada, cuando sacaba un codito, pegaba gritos sola de júbilo.

Ro desde el principio le fue bien, dio un montón de vueltas y llegaba contento, se tomaba un papelón y seguía (este pana cómo hace).

Más tarde llegaron mis sobrinos, mi hermana y mi cuñado, hicieron el recorrido con nosotros, y la pasamos buenísimo. Los tres sobrinos son buenos en la bici, pero Andrés en especial pareciera que nació para rodar, lo hace con una soltura y una sonrisa en la cara. Fue un día feliz.

Buena vida y a rodar,
L.A.











No hay comentarios:

Publicar un comentario